Conoce a Max, un husky de doce años y Quackers, un pato de cuatro años. Dos mejores amigos viviendo en el campo de Strout, Minnesota.
La pareja de pero y pato se conoció poco después de que la mejor amiga de Max, Sasha, falleciera. Max fue adoptado por los Riley cuando tenía cinco años y rápidamente se unió a su perro familiar, Sasha. Sasha y Max fueron inseparables hasta la prematura muerte de Sasha. Los Riley vieron lo desconsolado y solitario que estaba Max y decidieron que había que hacer algo.
Quackers era otro animal huérfano. Él también había perdido un par de amigos en el camino. No pasó mucho tiempo para que el patito y el husky se unieran.
“No tenía amigos, por lo que Max se sentaba junto a su corral todo el tiempo y creo que se unieron de esa manera”, dijo el propietario Patrick Riley. “Después de que lo dejamos salir, simplemente nunca se separaron".
Los dos mejores amigos hacen todo juntos. Duermen juntos, comen juntos, beben juntos y, a menudo, se van de aventuras juntos. Se puede encontrar a la pareja deambulando por la autopista 28, pero no los busques si tienes prisa. Se sabe que los dos causan atascos de tráfico por parte de los turistas que se detienen para tomar fotos.
La pareja demuestra que el amor es amor, independientemente de la especie o el género. Para amistades animales más improbables, echa un vistazo a la siguiente historia de animales: Aparece un pato misterioso que cura la depresión de dos años de un perro en duelo.
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